¿Es posible festejar de manera amigable con el ambiente? ¿Son compatibles los regalos con el consumo responsable?, pueden ser preguntas habituales por estos días.
El consumo responsable es una actitud y una forma de vivir, que implica sobre todo dos cuestiones: consumir menos y que aquello consumimos sea lo más sostenible posible.
Para tener una idea, en Argentina el promedio de generación diaria de residuos por persona es de 1,15 kilos, lo que representa unas 49.300 toneladas por día, y alrededor de 18 millones de toneladas anuales, cifras que exhiben "uno de los problemas de gestión más acuciantes por falta de medios técnicos y financieros", según el Informe del estado del ambiente elaborado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación.Entre las opciones de menor impacto, lo prinicipal es elegir agasajos que estén hechos de materiales reciclados, podemos optar por papel de diario, de revistas, o reutilizar telas.
El objetivo es que lo que demos tenga un tiempo de vida mayor para que realmente esos
recursos que se tomaron del planeta justifiquen su fin.
-Presentadas en vaso de vidrio transparente y tapa de cerámica blanca: vela de soja aromática.
-Un libro siempre es una buena opción.
-Regalar moda sostenible o visitar ferias es alimentar a la economía circular.
-Maquillaje sostenible y ecológico no testeado en animales.
-Una fragancia es un agasajo único.
-Podes ofrecer una experiencia de un concierto, entradas para ir al cine o una invitación a comer a algún restaurante.
-Gift card para peluquería, uñas o cejas/pestañas,
-Plantas o flores además de ser un regalo sustentable, es una invitación a conectarse con la naturaleza.